La relación entre Powell y el mercado nunca ha sido precisamente idílica. Powell el abogado que hace las funciones del que debería ser el economista más importante del mundo tiene un carácter donde la facilidad de comunicación con el mercado no es una de sus facetas destacadas.
Una faceta que por ejemplo manejaba magistralmente Greenspan. Bernanke tampoco era manco, pero ya con Yellen el mercado se desconcertaba con su política de comunicación para perderse por completo con Powell.
El problema además es que Powell no parece moverse en el consenso de los demás miembros del FOMC y da la sensación de que actúa por libre, en un tono de dureza activista, que solo se ve en algún que otro miembro como Bullard.
Sus duras intervenciones recientes que han tumbado al mercado, están muy recientes en la memoria y ayer Reuters decía que nadie se atrevía a comprar ante el hecho de que hoy a las 19h30 tiene una comparecencia. El objeto de la charla es hablar de las perspectivas económicas y de la situación del mercado laboral.
Powell parece querer ser el heredero de Volcker, si es así al mercado le queda sufrimiento por delante. Su afán no es hacer caer a los mercados, sino frenar la mejora de condiciones financieras que supone cada subida de mercado, en un momento en que necesita que esas condiciones financieras sean muy restrictivas para frenar la inflación. Si el mercado sube se lo encontrará a él en frente por este motivo.
En cualquier caso a partir de ahora cualquier intervención suya debe ser considerada como evento de alto riesgo, ojo por tanto a las 19h30 de hoy. No necesariamente tiene que tener que hablar de lo que teme el mercado, no es un acto oficial de la FED, pero nunca se sabe.