Veamos los puntos más importantes.
Han enfatizado la robustez de la expansión y además dice que los indicadores de alta frecuencia se han estabilizado. La economía doméstica está mostrando aguante y además mitiga los riesgos bajistas que tenemos por delante.
De momento, los riesgos contra el crecimiento están equilibrados pero podría darse el caso de que una valoración negativa de dichos riesgos apareciese.
Se constató preocupación por las tensiones comerciales y que pudiesen llevarnos a un descenso más general de la confianza. Los efectos adversos de estas tensiones comerciales de momento son limitadas pero aún así podrían impactar la zona euro de forma más contundente con el paso del tiempo.
Punto negativo la referencia a que los factores detrás de la reducción de crecimiento podrían no ser transitorios.
Por último, se están fortaleciendo las presiones de los costes domésticos.
