Los rendimientos de los bonos de la zona euro se estabilizaron el martes, tras haber subido un día antes, mientras los mercados esperaban los datos de inflación de febrero del bloque.
Después de su peor rendimiento mensual en años en febrero -cuando las apuestas de que el estímulo fiscal de Estados Unidos impulsaría la inflación y el crecimiento hizo que los rendimientos de los bonos mundiales subieran bruscamente- los mercados cambiaron de rumbo el lunes, y los bonos subieron mucho sobre todo en Europa y Asia.
Después de que los principales índices de referencia marcaran el lunes su mejor rendimiento diario desde junio de 2020, los bonos de la zona euro se estabilizaron el martes, con los rendimientos de Alemania a 10 años, la referencia de la región, sin cambios en el -0,34% a las 0814 GMT.
Los rendimientos de los bonos italianos a 10 años también se mantuvieron sin cambios en el 0,66%, dejando la brecha estrechamente observada con los equivalentes alemanes -la prima de riesgo de la deuda italiana- por debajo de los 100 puntos básicos.
La atención se centra en la estimación preliminar de la inflación de febrero en el bloque que se publicará a las 1000 GMT. Un sondeo de Reuters espera que muestre un aumento de los precios del 0,9% interanual, sin cambios respecto a enero, mientras que se espera que una medida más estricta que excluya los costes de los alimentos y la energía muestre una inflación que se reduzca al 1,1% desde el 1,4% del mes pasado.
Sin embargo, los datos de inflación de Italia y Alemania superaron ligeramente las expectativas.
«En el entorno actual del mercado, en el que la estabilización por parte del banco central sigue siendo frágil, es probable que una lectura más alta de lo esperado ejerza una nueva presión sobre los rendimientos», dijeron los analistas de UniCredit a los clientes.
La atención también se centró en el Banco Central Europeo, cuyos datos semanales de compra de bonos mostraron una ralentización de las compras netas durante la venta masiva de la semana pasada, mientras muchos pedían un aumento, aunque el banco dijo que el descenso se debía a los elevados reembolsos.
La declaración financiera semanal del BCE a las 1400 GMT mostrará el alcance de esos reembolsos.
El vicepresidente del banco, Luis de Guindos, dijo en declaraciones al diario portugués Publico publicadas el martes que el BCE está totalmente abierto a recalibrar su programa si considera que el aumento de los rendimientos nominales puede tener un impacto negativo en las condiciones de financiación. Varios responsables políticos han pedido al banco que actúe.
A pesar de las cifras de la semana pasada, Christoph Rieger, jefe de investigación de tipos y crédito de Commerzbank, dijo que varios indicios apuntaban a que el BCE podría haber aumentado sus compras de bonos desde entonces.
Citó la subida simultánea de los bonos alemanes e italianos el lunes sin un motivo aparente, la ampliación de los diferenciales de los swaps y el rendimiento superior de los bonos alemanes a 30 años a finales de la semana pasada frente a sus equivalentes estadounidenses. (Información de Yoruk Bahceli; edición de Susan Fenton). Reuters.Traduce serenitymarkets.