Alegando un comportamiento anticompetitivo por sus compras de Instagram y WhatsApop en 2012 y 2014. Aducen que compró a sus potenciales rivales para evitar su competencia. Es increíble ( sin perjuicio de que pueda ser justa la demanda), en su momento la Comisión Federal de Comercio examinó las operaciones y no puso ninguna objeción monopolística. Y ahora que las dos compañías absorbidas se han convertido en unos «monstruos» de las redes sociales , acusan a Faceboock de dejar sin alternativas a los consumidores. Seguramente será una cuestión de: ¿ cuanto hay que pagar?.