El Comité de política financiera dice que el CCYB, el mecanismo creado para dotar de capital en condiciones de empeoramiento de acceso a la liquidez que se temía tras el referéndum de salida de Reino Unido de la Unión Europea, sube el tipo desde cero hasta el 0,5% con el objetivo de subir al 1% en noviembre.
Lo anterior es negativo para los bancos, ya que al subir el porcentaje significa que se va a pedir más requerimientos de capital a los bancos.
De momento no hay miedo porque consideran que el entorno financiero doméstico tiene unos niveles de riesgos estándar, de momento no hay peligro, además consideran que algunos riesgos globales no se han implementado aunque siguen teniendo un ojo en la situación financiera de China.
Dado que siempre existe el peligro de burbujas y posibles catástrofes por el exceso de crédito barato, consideran que el crédito al consumo ha crecido rápidamente y están vigilando comportamiento de los prestamistas.
Si los riesgos fuertes volviesen otra vez a la palestra, el ratio del CCYB podría ser bajado, liberando dinero.
Este mes las autoridades del país van a emitir nuevas recomendaciones sobre el crédito al consumo y además pondrán en marcha pruebas de esfuerzo sobre el mismo. También van a seguir supervisando los planes de contingencia de las instituciones financieras incluidas un posible escenario de no acuerdo de las negociaciones de salida de la Unión Europea.