Como se puede observar en el gráfico a semanas, los máximos del año están en la zona de los máximos de 2016 y nos dejó una karakasa invertida en sobrecompra en el RSI. El volumen no acompañó pero con las otras dos condiciones como mínimo debíamos estar en alerta.
Los descensos en el precio no se han hecho esperar y el RSI ha perdido tendencia tras tendencia. Ahora la atención está puesta en el acumulación distribución porque si pierde la tendencia de este año, los problemas pueden acelerar.