La economía de la eurozona se contrajo un 0,1% durante el tercer trimestre de 2023, lo que supone un cambio de tendencia respecto al crecimiento del 0,1% revisado a la baja del trimestre anterior. Fue el primer descenso del volumen del PIB desde el último trimestre de 2022, atribuido principalmente a una contribución negativa de 0,3 puntos porcentuales de la variación de existencias.
Por su parte, la inversión fija se mantuvo sin cambios (frente al -0,1% del segundo trimestre) y la demanda exterior neta tuvo una contribución neutra al PIB, ya que el descenso del 1,1% de las exportaciones se vio compensado por una caída del 1,2% de las importaciones. En un tono más positivo, el consumo de los hogares aumentó un 0,3%, poniendo fin a tres periodos de contracción o estancamiento del crecimiento, mientras que el gasto público también avanzó un 0,3% (frente al 0,2% del segundo trimestre).
Entre las mayores economías del bloque, se registraron contracciones en Alemania (-0,1%), Francia (-0,1%) y los Países Bajos (-0,2%), mientras que España e Italia crecieron un 0,3% y un 0,1%, respectivamente.