El líder mundial de la energía eólica, Iberdrola, registró el miércoles una caída del 10% en su beneficio neto, pero superó las expectativas del mercado en unos nueve meses turbulentos en los mercados de la energía, en los que el gobierno de su país, España, se abalanzó sobre las ganancias de las empresas de servicios públicos.
Los precios de la electricidad y el gas se han disparado hasta alcanzar máximos históricos en todo el mundo con la reactivación de las economías tras la pandemia del coronavirus, pero empresas como Iberdrola afirman que no se han beneficiado de ello, ya que fijan los precios con los clientes por adelantado.
El beneficio neto de 2.410 millones de euros (2.800 millones de dólares) se situó, no obstante, justo por encima de la previsión de consenso de 2.360 millones de euros extraída de un sondeo de 10 analistas facilitado por la empresa.
Los objetivos de los gobiernos para reducir las emisiones de carbono que calientan el planeta y el fuerte apetito de los inversores por los negocios ambientalmente sostenibles han impulsado los planes de Iberdrola de gastar 150.000 millones de euros en triplicar su capacidad renovable global para 2030, a pesar de la volatilidad del mercado.
La compañía ha mantenido sus previsiones financieras para todo el año y ha dicho que está acelerando la expansión de su negocio eólico marino, un sector nuevo y de rápido crecimiento que es clave para los planes de descarbonización de algunas de las mayores economías del mundo.
En la actualidad cuenta con enormes turbinas con una capacidad combinada de 1,5 gigavatios que giran en alta mar y está construyendo otros 2,6 GW en Francia, Estados Unidos y Alemania.
La mayor carga fiscal del periodo provino de Gran Bretaña, donde Iberdrola opera a través de Scottish Power.
La compañía también ha sufrido un impacto de 85 millones de euros debido a la polémica medida del Gobierno español de recuperar los beneficios de las empresas que se consideran excesivamente rentables por los altos precios del gas, que ya se ha suavizado.
El beneficio neto ajustado por el impacto de los factores puntuales, que también incluyen la pandemia, aumentó un 5,2% interanual, hasta los 2.690 millones de euros.
(1 dólar = 0,8593 euros) (Información de Isla Binnie; edición de Stephen Coates) Reuters. Traduce serenitymarkets