Santander superó las previsiones con un aumento del 24% en el beneficio neto del tercer trimestre, gracias a la reducción de las provisiones para insolvencias y a los buenos resultados en Gran Bretaña.
El banco español, el segundo de la zona euro por valor de mercado, obtuvo un beneficio neto de 2.174 millones de euros (2.530 millones de dólares).
La presidenta del Santander, Ana Botín, se mostró “confiada” en alcanzar el objetivo de rentabilidad a medio plazo del banco, entre el 13 y el 15%, gracias también a la mejora de las perspectivas.
“Nuestros resultados en Estados Unidos y el Reino Unido fueron especialmente sólidos, lo que subraya la eficacia de nuestra estrategia en estos importantes mercados”, dijo Botín en un comunicado.
El resultado superó los 1.970 millones de euros previstos por los analistas encuestados por Reuters y el beneficio subyacente de 2.140 millones de euros registrado en el tercer trimestre de 2019, antes del estallido de la pandemia de coronavirus.
El beneficio neto y subyacente del tercer trimestre se mantuvo igual, ya que el banco no contabilizó ninguna ganancia o cargo extraordinario.
Su indicador de rentabilidad -el ratio de rentabilidad sobre fondos propios tangibles (ROTE)- subió hasta el 12,56% a finales de septiembre, desde el 12,29% de junio, por delante del objetivo de Santander para finales de año, que era de alrededor del 10%.
A finales de septiembre, el coste del riesgo del banco, que actúa como indicador de las pérdidas potenciales en el futuro, cayó a 90 puntos básicos desde 94 puntos, por debajo de su objetivo de unos 100 puntos básicos para todo el año.
Santander también consiguió mejorar su ratio de capital básico de nivel 1 totalmente cargado, la medida más estricta de solvencia, hasta el 11,85% desde el 11,7% de junio, impulsado por un recorte en el reparto de dividendos hasta el 40% desde el 50%.
En Gran Bretaña, que representa el 21% de los beneficios del Santander, el beneficio neto subyacente se triplicó con respecto a hace un año y aumentó un 13% en comparación con el trimestre anterior, gracias al aumento de los préstamos hipotecarios.
En el mercado estadounidense, que también representa más de una quinta parte de los beneficios subyacentes del Santander, el beneficio en términos subyacentes casi se duplicó con respecto al mismo trimestre del año anterior, ya que el banco siguió beneficiándose de la fuerte recuperación económica de Estados Unidos y de las políticas de estímulo fiscal. Sin embargo, cayó un 26% tras un fuerte trimestre anterior y unas mayores provisiones en el periodo de julio a septiembre.
En general, el margen de intereses, una medida de las ganancias sobre los préstamos menos los costes de los depósitos, aumentó un 8,8% con respecto al mismo trimestre de 2020, hasta los 8.460 millones de euros, y subió un 2,6% con respecto al trimestre anterior.
Los analistas esperaban que el NII se situara en 8.330 millones de euros.
(1 dólar = 0,8593 euros)
(Información de Jesús Aguado; información adicional de Emma Pinedo; edición de Inti Landauro y Jane Merriman) Reuters. Traduce serenitymarkets