Obviamente, el subsector de la IA forma parte del sector tecnológico, pero como veremos, existe una descorrelación importante que me lleva a tratar este como un sector individual como tema de estudio.
El sector tecnológico, en general, tuvo una de sus mayores revalorizaciones en el inicio de la crisis del Covid-19. Tras las fuertes caídas que atenazaron las bolsas mundiales desde finales de enero de 2020, el NASDAQ 100 Technology (índice de referencia) logró revertir las pérdidas en apenas 4 meses y seguir creciendo hasta febrero de 2021, lo que en la práctica significa una subida continuada desde los 4.030 puntos en marzo de 2020, hasta los 8.470 puntos febrero de 2021. Pero esta tendencia alcista se ha paralizado, consiguiendo crecer hasta 8.525 ptos hasta el 07 de julio de 2021, durante 5 meses solo ha aumentado su valor 55 ptos, apenas un 0.65%.
En el sector de la IA, el comportamiento durante el comienzo de la crisis fue muy similar tanto en la recuperación como en el crecimiento posterior hasta febrero de 2021, fecha en la que el STOXX® AI Global Artificial Intelligence ha empezado a marcar diferencias respecto al Nasdaq 100, acumulando un crecimiento desde los 329 ptos el 1 de febrero, hasta los 377 el 7 de julio, una revalorización del 14,59%.
Aunque el impacto y la recuperación han sido similares en ambos sectores, el crecimiento esperado difiere sustancialmente.
En el sector tecnológico, se estima una tasa de crecimiento anual compuesta CAGR del 16,4% en el periodo de 2021-2028, debido sobre todo a la creciente penetración de internet en el consumo, la digitalización y la automatización industrial creando segmentos disruptivos en los que las empresas están obteniendo beneficios por menor coste y mayor producción.
Para el mercado global de la IA, se espera que crezca a un CAGR del 40,2% en el periodo 2021-208.
Tanto los grandes gigantes tecnológicos, como empresas más recientes están trabajando para hacer más accesible la IA para usos empresariales.
Tanto la accesibilidad a las bases de datos, el progreso en el aprendizaje profundo o las redes neuronales, son lo que están llevando a que gran parte de las industrias están implantando la IA en sus modelos de negocio.
Se prevé que el sector salud sea el de más crecimiento en 2028 aplicando la IA a la cirugía asistida por robot, ensayos clínicos, diagnóstico preliminar o diagnóstico por imágenes, seguido por BFSI (banca, servicios financieros y seguros) con la implementación en el análisis financiero, evaluación de riesgos y gestión de carteras.