Las actas subrayaron la profunda división dentro del comité de política monetaria de 19 miembros sobre cuál es la mayor amenaza para la economía: una debilidad en la contratación o una inflación persistentemente elevada.
La mayoría de los funcionarios considera apropiado realizar recortes adicionales de los tipos de interés si la inflación disminuye con el tiempo, tal y como se espera.
No obstante, algunos funcionarios dejaron claro que creen que los tipos deberían mantenerse sin cambios “durante algún tiempo” tras la reunión de diciembre.
Las actas mostraron que incluso algunos miembros de la Fed que apoyaron el recorte lo hicieron con reservas.
“Algunos de los que apoyaron reducir el tipo de política en esta reunión indicaron que la decisión estuvo muy ajustada o que también podrían haber respaldado mantener sin cambios el rango objetivo”, señalaron las actas.
Aun así, esa afirmación sugiere que la división no fue tan profunda como algunos han indicado.
Las actas siguieron apuntando a diferencias considerables entre los responsables de política sobre si la inflación o el desempleo representan el mayor riesgo para la economía estadounidense.
“La mayoría de los participantes señaló que un avance hacia una postura de política más neutral ayudaría a evitar la posibilidad de un deterioro significativo de las condiciones del mercado laboral”, indicaron las actas.
Al mismo tiempo, añadieron, “varios participantes señalaron el riesgo de que una inflación más elevada se consolide y sugirieron que seguir bajando el tipo de política en un contexto de lecturas de inflación elevadas podría interpretarse como una menor firmeza del compromiso de los responsables con el objetivo de inflación del 2%”.
Por último, las actas confirmaron que los participantes consideraron que los saldos de reservas habían descendido a niveles adecuados, lo que hace apropiado iniciar compras de bonos del Tesoro a corto plazo para mantener una oferta suficiente de reservas a lo largo del tiempo.
Por ahora, los mercados permanecen indiferentes a todo esto, con las probabilidades de recortes de tipos sin cambios y las bolsas prácticamente estancadas.




