La tasa de inflación de la zona euro se confirmó en el 2,9% interanual en octubre de 2023, marcando la cifra más baja desde julio de 2021, muy cerca, pero aún por encima del objetivo del BCE del 2%, impulsada principalmente por un descenso de los precios de la energía y una ralentización de la inflación de los alimentos.
Mientras tanto, la tasa subyacente, que excluye los volátiles precios de los alimentos y la energía, también disminuyó al 4,2% en octubre, alcanzando su nivel más bajo desde julio de 2022.
Los costes energéticos se desplomaron un 11,2% (frente al -4,6% de septiembre), mientras que se moderaron las tasas de inflación de los alimentos, el alcohol y el tabaco (7,4% frente a 8,8%) y los bienes industriales no energéticos (3,5% frente a 4,1%).
La inflación de los servicios se mantuvo relativamente estable en el 4,6%, frente al 4,7% del mes anterior.
En términos mensuales, los precios al consumo aumentaron marginalmente un 0,1% en octubre, tras un incremento del 0,3% en septiembre.