La inflación de los precios al consumidor en la zona euro se mantuvo estable en el 2,2% en abril de 2025, superando ligeramente las expectativas del mercado del 2,1% y situándose apenas por encima del objetivo del 2,0% del Banco Central Europeo, según la estimación preliminar.
Una caída más pronunciada de los precios de la energía (-3,5% frente al -1,0% en marzo) fue compensada por una aceleración de la inflación en los servicios (3,9% frente al 3,5%) y en alimentos, alcohol y tabaco (3,0% frente al 2,9%).
Los precios de los bienes industriales no energéticos aumentaron un 0,6%, sin cambios respecto a marzo.
Por su parte, la inflación subyacente —que excluye alimentos y energía— subió al 2,7%, desde el mínimo de tres años del 2,4% registrado en marzo, superando también el pronóstico del 2,5%.
En términos mensuales, los precios al consumidor aumentaron un 0,6% en abril, igual que en marzo.